La Colonoscopía es un procedimiento en el que un especialista utiliza un tubo largo, flexible y estrecho con una luz y una pequeña cámara en un extremo, llamado colonoscopio, para observar el interior del recto y el colon.
La colonoscopia puede mostrar tejido irritado e inflamado, úlceras, pólipos y cáncer.
Una colonoscopía puede ayudar a su médico para averiguar la causa de los síntomas tales como diarrea persistente o un cambio en sus hábitos intestinales.
Si usted tiene sangrado o mucosidad proveniente del recto, mediante la colonoscopía puede ubicar
Las colonoscopias rutinarias para detectar los síntomas tempranos de cáncer deben comenzar a los 50 años para la mayoría de personas, o antes si existe un antecedente familiar de cáncer colorectal, un historial personal de enfermedad intestinal inflamatoria o otros factores de riesgo.
El médico puede recomendar a los pacientes la frecuencia con la que deben hacerse una colonoscopia.
los problemas que podrían estar causando esto.
Si es necesario, pólipos u otros tipos de tejido anormal pueden ser removidos a través del endoscopio durante una colonoscopía.
Las muestras de tejido (biopsias) también se pueden tomar durante este procedimiento.